lunes, 28 de febrero de 2011

Todas las personas me resultan lindas últimamente. Sí, vos también.

Siento que este año se viene duro. Pero bien duro, a la par de un final como el de Scarface. No es por algo negativo, sino que estoy con muchísimas ganas de hacer muchísimas cosas entonces es ahí cuando la ecuación no me da. Temo enumerar todas las actividades extracurriculares planeadas por miedo a ser una completa vagabunda durante el año y dedicarme exclusivamente al colegio. Lo cual resulta patético, por más que mi prioridad número sea pasar a quinto año hecha y derecha. Además un repentino sentimiento de festividad me invade a mí y a todos mis amigos. ¿La fisura, el colegio, las actividades, las obligaciones? Estaría bueno insertar aquí el sonido que hace un automóvil al frenar abruptamente: ¡Loca recién es primero de marzo! 
A lo que voy es que, 2011 vas a tener que ponerte las pilas porque tu predecesor estuvo bien piola.

P.D: Si alguien puede ofrecerme un laburo pobretón, bienvenido es. Sé cuidar volantes y repartir bebés.

martes, 22 de febrero de 2011

Casi Cassie


Voy tejiendo cationes, para que todo resulte más agradable al paladar. Y es así que hoy no me hago la Drama Queen. Estoy bien, lo acepto, y está bien.

sábado, 12 de febrero de 2011

Tenemos borrachera y un mapa de Buenos Aires

místico ensueño de verano 
directo a los ojos sin 
ningún umbral para atravesar 
es sólo el hilo de mi pensamiento 
y el tuyo enredado 
unido a mi cráneo 
acá están también mis tripas
un veneno fuerte llamado 
verdad, 
un fuego crucial llamado 
destino, 
es el quinto bar que visito 
para echarle ginebra a este dolor 
y lo que me inunda es el calor 
místico ensueño de verano 
libérame de tí, de vos, de quién seas
pronombre personal.  
tengo vibrando en mis labios tu apellido 
¿lo digo? ¿me condeno? ¿qué hago? 
el viaje en colectivo es tan largo 
que el sentimiento se me demora 
y puedo conectar estas rutas con las mías. 
creo que es hora de dispararme
con esta munición de ideas.

jueves, 3 de febrero de 2011

Paciencia

Estaba esperando este momento. Sentirme llena de palabras y pensamientos que evocaran a un verdadero encuentro conmigo misma. Que me pusieran firme y plena de ganas de continuar con este camino. Todo gracias a un libro en el cual parecieran estar todas las expresiones unidas entre sí por una magia que excede mi intelecto. Donde cada letra es el miembro de un cuerpo de carne real. Ese libro está vivo, y está llamándome ávidamente a la reflexión.


(A veces los recuerdos son tan lejanos que me pregunto si habrán sido verídicos).